Jorge Aguirre Charvet

El Ministro colombiano de Defensa, Juan Manuel Santos, dijo hoy a CNN Internacional que Raúl Reyes despachaba desde Ecuador y que todos sus visitantes y todos los periodistas que iban a entrevistarlo ingresaban por territorio ecuatoriano.
Con tono duro el funcionario colombiano afirmó que existió “permisividad y complicidad” para con la guerrilla colombiana por parte del gobierno ecuatoriano y que ese es el tema de fondo que debe preocupar a la comunidad internacional.
La declaración colombiana, de comprobarse, implica que Ecuador habría incumplido principios básicos del derecho internacional como el de la no intervención y normas especificas, de la ONU por ejemplo, como la de no proteger actividades terroristas.
Un país cualquiera puede, de ser el caso, alegar conducta impropia de un país vecino en el sentido mencionado y tomar represalias, fundamentando su actuación en el principio de la “legítima defensa”.
El gobierno ecuatoriano debe proceder con cuidado y esperar antes de seguir repitiendo insultos y acusaciones, más aún que según Santos todavía quedan tres computadores de Reyes para ser explorados en búsqueda de información.
Añadió que la INTERPOL y Europol revisarán en los próximos días esos computadores y podrán comprobar que no han sido manipulados. “Los computadores fueron hallados en una maleta convenientemente protegidos”, dijo
Calificó de “fábula” decir que Reyes fue detectado porque su teléfono satelital había sido interferido y reveló que la operación debió realizarse en Colombia, pero que se la trasladó a Ecuador al conocer que Reyes se hallaba en su campamento base.
“Nosotros hemos pedido disculpas, hemos pedido perdón por lo ocurrido el sábado. Ahora el tema de fondo es por qué el gobierno de Ecuador permite que grupos terroristas ataquen a nuestra población desde su territorio”, reiteró.
Calificó de mentira que el Ministro Gustavo Larrea haya informado al Presidente Álvaro Uribe, el 31 de diciembre, que Ecuador estaba realizando “gestiones humanitarias” para lograr la liberación de 12 rehenes de las FARC.
“Ecuador era un observador en el proceso de liberación de los rehenes. Era a través del gobierno de Venezuela que se lo estaba tramitando. No conocíamos ni nunca tuvimos información sobre la participación de Ecuador”, precisó Santos.
Reiteró que en cambio el gobierno de Colombia, en numerosas ocasiones, informó al gobierno de Ecuador que la guerrilla estaba actuando desde su territorio. “Ecuador siempre lo negó o nos ignoró”, dijo.
Finalmente explicó que las autoridades colombianas controlan todo su territorio y por eso los jefes guerrilleros tienen que esconderse en los países vecinos. “En Colombia los guerrilleros no pueden dormir tranquilos dos noches seguidas”, dijo.